L’Osteria

15 agosto, 2013

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Con tres locales en la ciudad, l’Osteria es una pequeña cadena germana de pizzerías que destaca por su buena relación calidad-precio y, por encima de todo, por ofrecer unas pizzas gigantescas. En Múnich, sobresale su restaurante de Künstlerhaus (en Stachus).

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Vista parcial de la sede en Lenbachplatz. /FOTO: L’OSTERIA

La primera vez que pase por delante de l’Osteria en la Künstlerhaus dudé si merecía la pena entrar a comer o no: un local precioso, demasiado incluso, más una decoración cuidada en una ubicación perfecta, lo que me hizo pensar en unos precios abultados.

Para nada, a pesar de lo que pueda parecer desde la calle, l’Osteria –en todos sus restaurantes lugar de estética trabajada– destaca por ofrecer una buena relación calidad-precio y, es más, por unas raciones generosas, también en cuanto a ensaladas o platos de pasta.

Escandaloso es lo de sus pizzas, que a pesar de ser individuales –también en los precios, que van de 8,5 a 10,5 €– resultan casi infinitas para el comensal. No en vano, el mayor defecto de las mismas es que resulta imposible terminárselas todavía calientes, por lo que la masa y sus extremos pierden su mejor textura para cuando los últimos bocados.

Una buena alternativa para los visitantes de l’Osteria menos hambrientos es la de compartir una pizza entre dos personas –se pueden pedir a medias de diferentes variedades, siempre que en conjunto se pida una unidad–.

Por cerrar el apartado gastronómico, cabe reseñar que la mayoría de sus ensaladas funcionan correctamente como plato principal. En cuanto a las bebidas, disponen de botellas de lambrusco a precios asequibles y, en la sede del centro, dispensan la cerveza local Augustiner.

Künstlerhaus
Desde 2013, l’Osteria cuenta con tres locales en Múnich, el pionero en el barrio el Schwabing, el de la Künstlerhaus junto a Stachus y el más recientemente inaugurado, en el barrio de Haidhausen a escasos metros del centro cultural Gasteig.

Para mi, no hay dudas de que el restaurante más atractivo es el de la Künstlerhaus, en la Lenbachplatz a unos metros de Stachus y el Altstadt muniqués. Me lo parece para el viajero también por la proximidad con el centro, pero más aún por la calidad del servicio, las dimensiones del local que te garantizan una mesa –aunque sea esperando unos minutos- hasta en las concurridas noches de fin de semana. Además, la decoración en este antiguo palacete es sencillamente genial, normalmente aderezada con pop italiano o español. Su terraza de verano es igualmente atractiva.

En resumen, por recomendar recomiendo l’Osteria en Lenbachplatz, tanto por su ambiente como, y esto sirve para sus compañeros, por lo generoso y acertado de sus pizzas. Seguramente no sean las mejores del planeta, pero sin ser malas se cuentan entre las más grandes. Una de mis pizzerías favoritas en la ciudad, para días de celebración colectiva y apetito desatado.