La Nueva Pinacoteca (Neue Pinakothek) de Múnich cierra sus puertas el 31 de diciembre de 2018, y no volverá a abrirlas hasta, como pronto, dentro de seis años. Aunque no lo parezca en un primer golpe de vista, el museo abierto en 1981 se había ido deteriorando hasta el punto de que habían aparecido goteras.
Casi 40 años después de la inauguración de su actual sede, la Nueva Pinacoteca de Múnich se ve obligada ahora a afrontar una renovación integral. Una operación ambiciosa que incluye la renovación de las instalaciones, del concepto de seguridad, de la climatización o la iluminación, y cuyo coste superará los 80 millones de euros, según las primeras estimaciones publicadas por la prensa local. Y, lo peor para el visitante, un mínimo de seis años de obras, que arrancan en enero de 2019 y que supondrán el cierre permanente de la exposición durante todo este tiempo.
Dos semanas para ver el museo (gratis)
Desde este lunes 17 de diciembre, y hasta el cierre el día 31 de este mes, la entrada Nueva Pinacoteca será gratuita, en lo que supone la última oportunidad en mucho tiempo para disfrutar de su espléndida colección.
Mientras dure el cierre, una selección de sus obras se podrán ver en la Alte Pinakothek, así como en la colección Schack. No obstante, la gran mayoría de pinturas permanecerán almacenadas hasta la reapertura.
De la Revolución francesa al siglo XX
La colección de la Neue Pinakothek se presenta de forma cronológica, arrancando a finales de siglo XVIII hasta llegar a las vanguardias de principios de siglo XX. Por el camino, la pinacoteca presenta cientos de obras maestras, tanto en clave local como internacional.
Entre sus obras más célebres, uno de los originales de Los girasoles, de Van Gogh, un óleo de la serie Los nenúfares, de Monet, y algunas piezas clave de Édouard Manet (Monet en su barca o El almuerzo) o bodegones de Paul Cézanne.
No faltan las pinturas de algunos de los principales paisajistas alemanes del siglo XIX. Caso de Carl Rotmann, y sus espectaculares escenas de la Grecia de la época, un encargo directo del rey Luis I de Baviera pensado inicialmente para su colocación en las arcadas del Hofgarten muniqués. O de Caspar David Friedrich, que aporta a la colección algunos de sus paisajes nebulosos y románticos.
En cuanto a los españoles, el museo acoge algunas pinturas de Goya, destacando Marquesa de Caballero (1807).
También se exponen numerosas pinturas en clave local, paisajes y escenas de Múnich y Baviera en el siglo XIX, y algunas relacionadas con Luis I y la familia Wittelsbach. Es el caso, entre otros, de los dos grandes lienzos de Peter von Hess relacionados con la llegada a Grecia del rey Otón I, hijo de Luis I de Baviera.
El impulso de Luis I
La Nueva Pinacoteca de Múnich abrió sus puertas en el año 1853, impulsada por Luis I de Baviera en los años previos. El edificio, situado justo enfrente de la Antigua Pinacoteca (Alte Pinakothek), fue concebido por Freidrich von Gärtner para albergar la colección principalmente compuesta por pintores muniqueses y alemanes, vinculados al Paisajismo y el Romanticismo.
Durante la II Guerra Mundial el edificio fue destruido durante los bombardeos aliados, por lo que se optó por construir una nueva sede para la compilación. El actual inmueble fue diseñado por el arquitecto alemán Alexander Freiherr von Branca e inaugurado en 1981.
De la misma forma que la Antigua Pinacoteca (Alte Pinakothek), la Pinacoteca Moderna (Pinakothek Der Moderne), el Museo Brandhorst o la Colección Schack, la Nueva Pinacoteca es una institución pública, perteneciente al land de Baviera y gestionada por el ente Bayerischen Staatsgemäldesammlungen.
www.pinakothek.de/en/neue-pinakothek
U-Bahn U2. Paradas en Königsplatz o Theresienstrasse. Tram 27, parada en Pinakotheken. Bus 100 parada en Pinakotheken