Cuando estamos de vacaciones, buscamos que el restaurante que elijamos cumpla con ciertos requisitos que hagan valer el gasto. Buena atención por parte de los camareros, platos abundantes y de calidad, proximidad a los sitios históricos de interés, ambiente agradable y acogedor con ornamentaciones típicas y, de ser posible, que nos cuente alguna historia. Pero cuando nos encontramos en un destino como Múnich, cuyo idioma nos suena a “chino básico”, como diríamos en Sudamérica, tenemos otro requisito de suma importancia: que tengan carta en español. Así conozcamos algo de alemán o manejemos muy bien el inglés, los platos de la cocina bávara demandan un largo tiempo de análisis o un menú en español que nos explique de qué se trata la oferta. Tratándose de platos que superan los diez euros, lo mejor será que estemos seguros de que lo que estamos ordenando será de nuestro agrado.
Es por eso que aquí les preparé mi selección personal de tres buenos restaurantes bávaros con carta (menú) en español que se encuentran en el centro histórico de Múnich. Estos cumplen con todos los requisitos mencionados anteriormente y que serán detallados a continuación: historia, ubicación, horarios de apertura y algunos platos a modo de ejemplo (de mi recomendación personal) con sus respectivos precios a noviembre de 2018.
Ratskeller München
El número 1 de mis recomendados y mi favorito. El Ratskeller está ubicado en el subsuelo del ayuntamiento de la ciudad (por lo tanto, en el mismo centro histórico), posee techos abovedados pintados que lo convierte en un atractivo turístico en sí y cuenta una excelente oferta gastronómica. Pero lo más importante, que es el centro de esta nota, es que no solo tiene un menú en español, sino que cada plato tiene una fotografía que nos ayuda a tener una idea más exacta de lo que pedimos. Sin dudas, de los menús más prácticos y fáciles de entender que hay en la ciudad.
Historia
El Ratskeller se encuentra ubicado en el subsuelo del nuevo ayuntamiento de Múnich. El edificio fue proyectado por Georg von Hauberrisser en estilo neogótico y su construcción se extendió desde 1867 hasta 1908, siendo un gran ejemplo del esplendor de Alemania a principios del siglo XIX.
Cuenta con 1.100 asientos y 15 habitaciones, entre ellas el arca de Noé, Jean-Claude’s Bistro & Wine Bar, The Royal Dolores Munich Pub & Bar, Weinwirtschaft – vinos de Franconia y Baden, Ludwig l, Viejo tonelero y El Prunkhof, un patio histórico que se abre solo durante los meses de verano.
En un ambiente único enmarcado por salas con pinturas relacionadas con historias religiosas, tradición cervecera y vinícola, y con alusiones a la familia real de Baviera; es posible disfrutar de la buena cocina bávara, así como también de platos originarios de otros países. El Ratskeller cuenta, a lo largo de su calendario anual, con semanas dedicadas a la gastronomía extranjera.
Y para aquellos que prefieren el vino antes que la cerveza, en este subsuelo tienen la oportunidad de degustar buenos vinos de Franconia, más precisamente de Juliusspital Würzburg, la segunda bodega más grande de Alemania.
Platos con precios (ejemplos)
Käsespätzle (pasta con queso, lo más parecido a Macarrones con queso. Ideal para niños o para quien no quiera comer carne) 11,50 €.
Wollburst (salchichas hechas de mezcla de ternera y cerdo, servidas con puré de patatas) 13,00 €.
Schweinsbraten (cerdo asado y estofado servido son salsa hecha del caldo de la propia carne y cerveza oscura. Se acompaña con albóndigas de pan o patatas) 12,00 €.
Schweinshaxe (codillo de cerdo bávaro) 20,00 €.
Apfelstrudel (pastel de manzana) 8,50 €.
Kaisershmarn (manjar del emperador: trozos de crepes caramelizados cubiertos con azúcar impalpable y acompañado por pasas, almendras molidas, trozos de manzana y frutas) 13,50 €.
También cuenta con menú infantil.
Horarios
De lunes a sábados: 10 a 01 horas – Domingo: 10 a 24 horas.
Dirección y teléfono de contacto
Marienplatz 8, 80331 München – +49 89 2199890
Schneider Bräuhaus (Weisses Bräuhaus)
Si eres fanático de la cerveza de trigo, no puedes perderte esta recomendación. En esta casa especializada en weissbier (cerveza de trigo), vas a encontrar nueve variedades que van desde la 0,5% vol. alc. (Alkoholfrei- cerveza sin alcohol) hasta 12% vol. alc., de la Aventinus Eisbock.
Historia
Desde 1540 existía ya en este mismo lugar una cervecería conocida por su buen trato hacia la gente y a donde a los muniqueses les gustaba ir a tomar la buena cerveza que se servía.
Después de numerosos cambios de propietarios e incluso del fin de la producción de cerveza, la fábrica comenzó una nueva vida en 1872 cuando Georg I Schneider la despertó de su letargo. Entre 1855 y 1873 fue el arrendatario de la cervecería real Weisses Bräuhaus de Múnich y creía, en contra de la mayoría, que este tipo de cerveza de fermentación alta tenía un gran futuro.
Durante el reinado de Luis II fue el primer ciudadano que consiguió el privilegio blanco, es decir, el derecho a producir cerveza de trigo, por lo que adquirió la cervecería Maderbräu, entonces inactiva. Aquí comenzó, junto a su hijo Georg II la elaboración de su propia cerveza de trigo, naciendo así la cerveza Schneider Weisse. Y convirtiendo de esta forma la antigua cervecería Maderbräu en la Weisse Brüauhaus G. Schneider & Sohn.
El éxito de la cervecera superó pronto los pronósticos. Con toda la razón se califica a Georg I Schneider como el pionero de la cerveza de trigo ya que supo respetar la antigua fórmula de producción de este tipo de cerveza salvándola de esta forma de su perdida y haciendo posible su utilización en los nuevos tiempos.
Después de décadas de éxito, la cervecería Weisse Bräuhaus quedó casi totalmente destruida durante la Segunda Guerra Mundial, por lo que Georg IV Schneider tuvo que desplazar la producción de cerveza a Kelheim (a unos 100 km al Norte de Múnich), recuperando la cervecería de la capital bávara como restaurante y punto de venta. Fue Margareta Schneider, esposa de Georg V, la que en 1988 y siguiendo el modelo original se ocupó primero de la restauración de la planta baja y más tarde de la recuperación de las salas de los pisos superiores. Con la restauración de la fachada se volvió a abrir en 1993.
Platos con precios (ejemplos)
Münchener Schweinbraten (cerdo asado, servido con albóndigas de pan y salsa de cerveza oscura) 10,90 €.
Kälberne Milzwurst (embutido de ternera al horno o frito en mantequilla, con ensalada de patatas) 9,90 €.
Apferlstrudel “Shneider Bräuhaus” (típico pastel de manzana con salsa de vainilla y helado de vainilla) 7,20 €.
Apferkücherl im Bierteig gebacken (buñuelos de manzana a la cerveza con canela, helado de vainilla y crema batida) 7,40 €.
Horarios
Todos los días de 8 a 23 horas.
Dirección y teléfono de contacto:
Tal 7, 80331 München – +49 89 2901380
Augustiner Klosterwirt
Frente a las dos torres de la catedral de Múnich (Frauenkirche o Iglesia de nuestra querida señora), el Klosterwirt presenta una oportunidad ideal para probar la cerveza preferida de los muniqueses (y la más antigua).
Historia
El nombre del restaurante evoca la tradición, la historia de la fábrica de cerveza y su hospitalidad desarrolladas durante siglos a la Klosterwirt.
El restaurante está situado justo en frente a donde la cerveza Augustiner fue elaborada por primera vez hace casi 700 años. La construcción pintada de verde que podemos ver si nos sentamos a tomar una Helles o una Weiss en la terraza Oeste es a donde antiguamente se encontraba el monasterio. Hoy, se ubica allí la central de policía.
Originalmente, cerca del monasterio se encontraba una taberna a donde los muniqueses le daban una cálida bienvenida a los viajeros. Allí compartían manjares suculentos y bebían la que muchos consideran como la mejor cerveza de Múnich. En una especie de consenso general, es la marca de cerveza más elegida por los muniqueses. Los motivos van desde ese “gustito a tradición” hasta los económicos. Hay quienes aseguran que de las 6 grandes fábricas de cerveza emplazadas en la ciudad (Hacker-Pschorr, Löwenbräu, Spaten, Hofbräu, Paulaner, Augustiner) Augustiner, además de ser la más antigua, es la que menos fines comerciales persigue.
El lema del nuevo emplazamiento es conservar esa tradición de hospitalidad genuina y darle la bienvenida a los viajeros que llegan a la capital bávara. Conociendo un poco más esta historia, cobra sentido el por qué es uno de los restaurantes bávaros que tratan excelentemente al turista y al extranjero. Podríamos decir que, de los lugares para comer en el centro histórico, el Augustiner Klosterwirt es el que mejor atención tiene. Los camareros siempre te atienden con una sonrisa y, si tomas asiento en alguno de los bancos de la barra, sin dudas te sacarán una amigable conversación.
El restaurante es un trabajo en conjunto del banco de Múnich y la fábrica de cerveza Augustiner. Es por eso que en la planta superior nos encontramos con el logo de dicha entidad bancaria.
Platos con precios (ejemplos)
Hausgemachte Spinatknodel (Albóndiga de espinaca de la casa) 12,90 €.
Wiener Schnitzel vom Kalb (milanesa/ filete empanado de ternera) 19,50 €.
Jungschweinebraten (cerdo en salsa de cerveza negra con albóndiga de papa y ensalada de col y tocino) 12,90 €.
Oma´s Apfelstrudel (pastel de manzana de la abuela con salsa de vainilla y helado) 6,90 €.
Horarios
Todos los días de 10 a 24 horas.
Dirección y teléfono de contacto
Augustinerstraße 1, 80331 München – +49 89 55054466